miércoles, 10 de julio de 2019

Stan “The Man” Lee: un autor genial lleno de humanidad



Nacido con el nombre Stanley Martin Lieber, muchos saben que Stan Lee tenía vocación de escritor cuando comenzó, y que admiraba a novelistas como R.L. Stevenson o Arthur Conan Doyle. Así que se cambió el nombre como guionista de cómics a Stan Lee, reservando el verdadero para cuando empezara su “verdadera” carrera como escritor. También todos sabemos a estas alturas que fue el creador de personajes tran entrañables ya para los aficionados a los cómics como Los 4 fantásticos, X-Men, los Vengadores o Hulk. También sabemos que hizo cameos en las películas de prácticamente todos sus personajes trasladados a la pantalla. 




Sin embargo, no mucha gente sabe que fue sobre todo un hombre de una gran humanidad, profundamente enamorado de su mujer Joan Boocock Lee durante  prácticamente setenta años. Según ha relatado el propio Stan Lee en varias ocasiones, un amigo le organizó una cita a ciegas con una chica en una agencia de modelos. Cuando llegó , fue Joan quien le recibió. Sus palabras le sonaron como música y al ver su rostro, Stan no pudo evitar decirle que la amaba, y que había estado dibujando su rostro desde niño (la narración de este encuentro está recogido en Stan Lee: The Man Behind Marvel, de Bob Batchelor, y se puede ver en su totalidad en el vídeo al final de este artículo). 

Un hombre capaz de declararse a la que va a ser su mujer durante décadas  al verla por vez primera, es sin duda capaz de poner su corazón en todo lo que hace. Y ese fue el caso de Stan Lee. En 1940 empezó a trabajar como ayudante en la que entonces se llamaba Timely Cómics y que luego sería Marvel Cómics. Tras dos décadas trabajando allí, llegó el momento crítico de 1960, en que el que sería el padre de la mayor parte de los personajes superheróicos que conocemos en la actualidad estaba a punto de dejarlo. Fue entonces cuando tuvo una conversación con su mujer, que podemos reproducir como sigue:

Stan Lee: “Creo que este trabajo no me va a llevar a ningún lugar. Debería dejarlo y buscar algo mejor que hacer”
Joan Boocock: “Por qué no haces un cómic como tú lo quieras hacer. Lo peor que te puede pasar es que te despida, pero aún así ibas a renunciar”

Según cuenta el propio Stan Lee, entonces hizo los 4 fantásticos. Un cómic con acción y peleas, como le pedía Martin Goodman (jefe y propietario de Timely Cómics), pero en el que al mismo tenía cuatro personajes, y podía darles diferentes personalidades a cada uno. Lo que tenían estos personajes es que, aparte de superhéroes, eran humanos. De hecho, Los 4 F se distinguen por ser una familia: dos de ellos están casados, otro es hermano y cuñado, y queda Benjamin Grimm, que es el amigo de toda la vida, que ya forma parte de la familia.  El éxito de ventas de este cómic fue arrollador, y permitió a Stan Lee no solo desarrollar su taltento, sino además hacer de Marvel Cómics lo que es ahora. 

La carrera de Stan aún tenía que avanzar más en la humanización de los superhéroes. Esto llegaría con Spiderman, creado en 1962. Y aquí tenemos otro pequeño diálogo:

Stan Lee: “No tendría dinero suficiente, viviría con su tía enferma, de la cual tendría que ocuparse y, además, tendría que combatir a los malos”. 
Martin Goodman: “Stan, es la peor idea que he escuchado. Un superhéroe es evidentemente un adulto que no puede permitirse tener problemas. Además, la gente detesta a las arañas: ¡Nunca se llamará Spider-Man!”.

Sin embargo, la creatividad de Stan Lee se impuso, y hoy Spiderman tiene varias colecciones de cómics y películas.

La asociación con Steve Ditko creó a Spiderman y el Doctor Extraño, pero fue con Jack “The King” Kirby con quien vieron la luz los 4F, Hulk, los X-Men, los Vengadores o Thor. A pesar de ser dos increíbles personalidades creativas, los dos chocaron. Por una parte, Kirby reclamó que había hecho más que dibujar las historias de Stan. Consideraba que también había creado buena parte de los argumentos, debido al método de la Marvel. Por otra parte, aunque Stan Lee había reconocido a dibujantes, entintadores y coloristas como antes no se había hecho en la industria, los contratos a largo plazo no eran algo habitual en Marvel Cómics. Hubo disputas  sobre la propiedad de los personajes y aquello llevó a la airada salida de Jack Kirby de la editorial. Sin embargo, Stan Lee consideró siempre a Kirby como su mejor socio, el último encuentro de los dos titanes del cómic fue amistoso, y Stan acudió al funeral de Kirby en 1994. Sea como fuere el enfrentamiento entre las dos poderosas personalidades creativas, sus fans de todo el mundo quieren creer que se reconciliaron.

En definitiva, Stan fue un prolífico guionista y editor, que podemos calificar de genial. Sin embargo, tras el profesional estaba el hombre. Y un hombre de profunda humanidad —como todas estas historias prueban— de la que dotaría a todos sus personajes. Descanse en paz. ¡Excelsior!